Marcelo Rougier (CONICET-CEEED/UBA)
Hace ya varías décadas Jorge Schvarzer señaló la existencia de un complejo estatal-privado que habría cobrado forma a partir de los años cuarenta y constituido como uno de los factores clave en el impulso de las actividades industriales en la Argentina en las tres décadas siguientes, especialmente en las ramas básicas.
En esta ponencia centramos nuestra atención en la estructura burocrática de ese complejo haciendo foco en la Dirección General de Fabricaciones Militares (dgfm), creada en 1941 y controlada por el Ejército, y en la Comisión para el Desarrollo de los Metales Livianos (copedesmel), constituida en 1966 y dependiente de la Secretaría de Aeronáutica. Estos dos organismos militares tuvieron un papel central en el desarrollo de la producción de acero y aluminio. El estudio comparativo de las condiciones que les dieron origen así como de su funcionamiento, propuestas y concreciones nos permitirá arribar a una mejor comprensión del derrotero particular que condujo a la producción de estos insumos destacados de la producción industrial local y de los mecanismos específicos desarrollados por el Estado para la promoción manufacturera.