La incidencia de los actores privados en la conformación del sistema de seguridad social en el Urugu

Ponencia: Harriet

Silvana Harriett  (Instituto de Ciencia Política, FCS, UdelaR, Uruguay)

Existe consenso en el ámbito académico en torno a la idea de que Uruguay ha sido pionero en el contexto latinoamericano en materia de seguridad social. Asimismo, se ha resaltado el papel del Estado como principal configurador de este sistema, un Estado que, si bien juez y gendarme de acuerdo al diseño constitucional de 1830, comenzó muy tempranamente a otorgar prestaciones sociales, cuando en 1829 se aprobó la ley de Jubilaciones y Pensiones para viudas y huérfanos de los militares. Este intervencionismo estatal, que reconocía antecedentes en el período colonial, con el beneficio de retiro para funcionarios públicos, dio origen a lo que se ha denominado una primera etapa en el proceso de desarrollo del sistema previsional en nuestro país. A lo largo del siglo XIX, los beneficios se extendieron a los funcionarios del Estado, militares y civiles, así como a los maestros, configurándose un sistema elitista, estratificado, corporativo, que respondió a las necesidades del propio Estado de consolidarse como tal.

Los abordajes académicos sobre la seguridad social en el Uruguay se han centrado en la acción estatal como estructuradora del sistema de seguridad social. En este trabajo nos detenemos en el análisis de las formas de protección social en el ámbito privado, cuyo estudio consideramos imprescindible para conocer cómo se resolvieron esas contingencias por quienes no fueron cubiertos por la acción estatal, así como para evaluar su impacto en la conformación del sistema. El tramo temporal es la segunda mitad del siglo XIX, más específicamente el tramo del siglo que se corresponde con lo que se ha denominado el Uruguay de la modernización. En este período hubo sectores que tomaron la iniciativa de suplir la omisión estatal y organizar por ellos mismos la cobertura de algunas situaciones de riesgo (enfermedad, vejez, despidos). Fundaron así las sociedades de "mutuo socorro", donde el principio de solidaridad fue el pilar fundamental, las que se desarrollaron principalmente entre 1850 y 1905, por lo menos con sus características iniciales.

El análisis de las sociedades de mutuo socorro aporta una perspectiva menos estado- céntrica del proceso de construcción de la seguridad social en el Uruguay. Si bien la cobertura en términos de su alcance respecto a la población fue limitada, constituyeron una experiencia de organización que matiza la visión de un entramado social débil dependiente enteramente del Estado. Ahondar en este asunto puede aportar al análisis del papel de lo público y lo privado en la discusión sobre los desafíos de la seguridad social.