La red oligarca de Tepic, México, durante el siglo XIX

Ponencia Contreras Valdez

Mario Contreras Valdez (Facultad de Economía, Universidad Nacional Autónoma de México)

La decena de familias, extranjeras y mexicanas, que ostentaron los apellidos Barron, Rivas Góngora, Menchaca, Aguirre, Romano, Delis, Hildebrandt, Salazar, Somellera Rivas, y Lanzagorta, organizó la producción, el comercio, las finanzas y controló el poder político a lo largo del siglo XIX en la comarca tepiqueña, nucleada por el puerto de San Blas y la ciudad de Tepic, en el litoral del Occidente de México.

La educación formal por encima del promedio local caracterizó a este grupo de familias. Además disponían de información económica, política y cultural actualizada, con base en la prensa de la época, la literatura y por sus regulares viajes de placer y de negocios que emprendían de manera regular a distintas ciudades del país y extrajeras.

Para llegar a la cúspide económica y política que se prolongó a lo largo del siglo antepasado, algunos de sus miembros debieron establecer,, acuerdos comerciales, familiares, dentro y fuera de esa comarca. Luego de la Independencia de México, formaron su red social y política para beneficiarse con las reglas formales establecidas y también con las informales; fueron formales hombres de negocios y algunos de ellos también contrabandistas.

La comprensión de los tiempos políticos locales y nacionales por parte Eustaquio Barron, Menchaca y la familia Rivas Góngora fue un factor que les facilitó controlar oficinas estratégicas como la aduana marítima de San Blas y el ayuntamiento de la ciudad de Tepic. También esta condición les llevó a proponer un proyecto político local: la autonomía política con base en la constitución de una entidad federativa, situación que abrió la puerta para una larga confrontación política con otras familias y autoridades que tenían su asiento en la vecina ciudad de Guadalajara.

En la época de la república restaurada (1867), momento de creciente nacionalismo, en el que la oligarquía de Tepic logró controlar mejor las instituciones locales, una vez que se creó el Distrito Militar de Tepic, figura política administrativa que sería reemplazada años más tarde (1884) por el del territorio de Tepic.

Objetivos:

1)    Se explicará la conformación de una red constituida con las familias más ricas y poderosas de la comarca tepiqueña durante el siglo XIX.

2)    Se enfatizará en los acuerdos sociales, comerciales y políticos, tomados por esas familias para apreciar la profundidad y extensión de sus lazos, mismos que facilitaron.

Evidencia empírica

Las casonas edificadas en el centro histórico de la ciudad de Tepic, así como algunos edificios públicos y las criptas familias del panteón de esta ciudad, conservan placas en las que se refieren los apellidos de las familias ricas y poderosas de Tepic. La información inicial de estos primeros testimonios, más aquellos que dejaron los viajeros de la época, se enriquece con la de los archivos locales (registro público de la propiedad, el de notarias) además de los que se localizan en la ciudad de México, entre estos el de Relaciones Exteriores, Archivo histórico del agua y el Fondo reservado de la Biblioteca Nacional en donde se localiza la prensa tepiqueña del siglo XIX).

No se ignora la amplia historiografía publicada a nombre de colegas como Jean Meyer, Pedro Luna, Pedro López, José María Muriá, Sergio Valerio Ulloa, Javier Castellón Fonseca, Javier Vizcarra, entre otros más.